domingo, 9 de mayo de 2010

Carta a mi madre:


Mamá, se que no suelo decirte lo que siento cara a cara, pero no es solo contigo
.
- Se que te hago daño y te grito sin pensar en mis palabras, pero te quiero. Te quiero porque aunque tú no me lo digas sé que me quieres tanto que hasta yo podría decir que no eres capaz de querer así, parece no tener sentido ¿cierto? , estoy segura que me vas a entender. No me interesa que otra persona lea esto, tampoco me interesa si tiene sentido.
- Se que no vas a leer esto y estoy segura que sientes lo que escribo, estoy segura que te sientes culpable cuando peleamos por tu culpa, estoy segura que sabes que me siento fatal cuando peleamos por mi culpa.

- Se que cuando me voy me extrañas, se que te preocupas por mi, también se que te sientes orgullosa de mi aunque no lo demuestres.

Solo tengo que agradecerte por estar conmigo, por cuidarme hasta ahora que te reclamo que no lo hagas más, por compararme con mi hermano y decir que prácticamente él es mejor que yo, que no quieres que sea como yo, pero ¿sabes? tengo bien claro que lo haces para molestarme, de una u otra manera lo haces para que abra los ojos y no sea tan relajada. Algunas veces, eres como la típica chica del colegio que no se lleva bien conmigo y que me odia, pero nos queremos y lo sabes bien a pesar de todo y puedo decir TODO (no lo nombro porque nunca terminaría). Pero otras, hasta podría decir que tengo una buena relación con mi madre lo cual me enorgullece, ya que he escuchado mil y un historias de amigos, amigas, giles, agarres, etc. que no se llevan bien con sus madres.

Me gusta molestarte, me gusta que compartas mi humor, me gusta que le digamos juntas a mi papá “negro”, me gusta que molestemos juntas a mi hermano, me gusta tu comida, me gusta cuando sales porque se que eres feliz, me gusta hacerte enojar, me gusta que me levantes por las mañanas, me gusta que te molestes sin razón alguna y que te desquites conmigo, ese simplemente es tu carácter y por eso eres diferente a las demás, por eso tu familia te ama.

No soy la hija perfecta, tengo errores, tengo temores y tengo que aprender de ellos, me falta experiencia, soy una maleducada, no te hago caso, no arreglo mi cuarto y hasta a veces no levanto mis medias del suelo, pero gracias por estar siempre ahí, intento hacerte la madre más felíz del universo a base d esfuerzo, pero tu y yo sabemos que poco a poco las personas aprenden, que poco a poco se logran grandes cosas. Solo me queda decirte que, tus sueños se van a cumplir, no falta mucho solo paciencia, Bruno y yo te vamos a hacer sentir orgullosa de ser tú... a partir de todos los días.

Felíz día vieja. Te amo.

1 comentario:

Alejandra Segura dijo...

q lindo, recien lo leo :)